No puedo hacer muchas cosas por mi misma pero entre lo poco que hago está la pintura y me encanta. Pintando me siento libre, tranquila, sin miedo y plasmo lo que me gusta, lo que imagino y lo que me inspira. Creo que la pintura me dio una chispa nueva de alegría y sobre todo de amor, porque lo que pinto lo hago con gusto, dedicación y todo lo bueno de mi ser, que está plasmado en mi trabajo.